Nacho Vidal se lanzó al mundo del porno con 21 años en España. Trabajó como stripper para clientes VIP durante dos años antes de entrar a rodar. Después conoció a Rocco Siffredi, quien le abre las puertas de Hollywood, California. En Hollywood la carrera de Nacho se dispara hasta ser considerado uno de los mejores de este negocio.