Silvia Saint continua siendo una de las estrellas de la pornografía más famosas de la República Checa. Un ángel rubio de ojos azules con un cuerpo hecho para pecar. Silvia dio sus primeros pasos como modelo de lencería, pero entonces empezó a desnudarse para revistas, hasta que recibió una invitación a un casting para una película pornográfica. Desde entonces, se ha convertido en una leyenda en la República Checa.